Antes de empezar el experimento que hoy
os traigo, os voy a contar una pequeña historia:
Del Hierro, isla más occidental y meridional
de las Islas
Canarias, zarpó el 29 de enero de 1982 Steven Callahan, iba en un velero diseñado
por él mismo, llamado Solitario Napoleón, que lo llevó a vivir la aventura más trascendental
de su vida.
Durante
la noche del 5 de febrero, Steven se despertó al oír un golpe seco, una ballena
había embestido el casco de su velero, su
nave se hundía. El destino le había jugado una mala pasada, y lo peor, se encontraba
sólo y perdido en medio del océano, a 1300 Km de distancia de donde había partido.
Callahan consiguió escapar del barco que
se estaba hundiendo y logró salvarse en un bote inflable. Se pudo llevar con él
un equipo de emergencia, algunos alimentos, cartas de navegación, una antorcha y
un balde para recoger el agua de lluvia.
Él sabía que podía vivir varios días sin
comer pero no sin hidratarse, eso sí lo llevaría a la muerte irremediablemente,
si no llovía estaba perdido.
Por eso se las ingenió para conseguir agua,
sin necesidad de que lloviera, de forma muy similar a como lo vamos hacer en este
experimento.
Experimento:
Materiales:
- Un recipiente grande
- Un recipiente pequeño
- 1 cucharada de sal
- Colorante vegetal
- Film de plástico transparente
- Dos monedas
- Agua
Procedimiento:
1. En el recipiente grade verter agua hirviendo,
añadir sal y unas gotas de colorante. Remover hasta que se disuelva por completo
la sal y el colorante.
2. Colocar el recipiente pequeño en el centro del recipiente grande
con agua, este debe estar vacío y no debe flotar.
3. Cubrir el recipiente grande con una envoltura de plástico y colocar
una moneda o algo de peso en el centro, a la altura del recipiente interior. De
forma que la parte central de la envoltura quede un poco hundida.
4. Esperar 1 o 2 horas, observando que ocurre.
¿Qué ocurre?
El plástico interior se humedece
rápidamente y empieza a gotear dentro del vaso.
Si observamos el agua recogida en el recipiente
pequeño, ni tiene color ni está salada.
¿Por
qué?
De igual forma que en la lluvia, el agua caliente se evapora, sube
hasta el plástico, que posteriormente se condensa, cayendo en forma de lluvia, pero
solo lo hace el agua, ni la sal, ni el colorante, así se recoge agua sin más.
¿Cómo se las ingenió el náufrago
de la historia? El náufrago consiguió agua
potable con un destilador solar. Para ello, colocaba agua de mar en un recipiente,
ésta se calentaba por el sol y cuando aumentaba la temperatura se evaporaba. El
aire húmedo y caliente, subía hasta la cubierta, el vapor de agua se condensaba
y luego goteaba dejando la sal en la cubeta.
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